Hilo de Ariadna

Karlštejn – caja de caudales medieval a la orilla del Berounka

Este sorprendente castillo real se yergue a orillas del río Berounka ya desde el siglo XIV. Primero sirvió como residencia real fuera de la ciudad, pero con el tiempo se convirtió en el sitio donde se custodiaba el mayor tesoro del Sacro Imperio Romano Germánico. Las partes del castillo dedicadas a un uso sagrado son excepcionales: la capilla de santa Catalina, la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora y la sobrecogedora capilla de la Santa Cruz, con la mayor colección de pinturas góticas sobre tabla en el mundo. La contemplación del castillo desde los oteros de las inmediaciones es una experiencia única.

  • Photo:  centralbohemia.cz

No se vaya sin ver:

El castillo
Karlštejn    hrad-karlstejn.cz
Karlštejn está indisolublemente unido con su fundador, el rey checo y emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Carlos IV. El rey hizo que se construyera para habitarlo como residencia de vacaciones, posteriormente lo reconstruyó para depositar en él las joyas de la corona del Imperio, junto con su colección de reliquias. Puede visitar el castillo eligiendo entre tres posibles itinerarios (en checo, inglés, alemán y otras lenguas), que son accesibles solo con guía.

El prado del emperador
A solo un par de minutos a pie, desde la calle principal que lleva al castillo, tiene a mano una de las más hermosas vistas sobre toda la ciudadela.

Más información sobre el castillo:

  hrad-karlstejn.cz

Cuándo:

El castillo está abierto todo el año, en julio y agosto diariamente, y en el resto de la temporada turística a diario excepto el lunes, y fuera de la temporada turística, los fines de semana (para más información sobre el calendario de apertura, consulte sus páginas web). Para visitar los lugares sagrados del castillo, recomendamos reservar con anterioridad.

Cómo llegar:

Trenes directos desde Praga salen aproximadamente con un intervalo de media hora desde la estación central (el viaje dura unos 45 minutos), y desde la estación de Karlštejn hay que llegar al castillo a pie, lo que dura unos 30 minutos, cuesta arriba.